
Lula viaja por primera vez a Europa en medio de tensiones, para reforzar las relaciones comerciales con Portugal y España
Después de viajar a Argentina, Estados Unidos y, más recientemente, a China, donde hizo polémicas declaraciones sobre la guerra en Ucrania, que tuvieron mala repercusión en Europa, el presidente Lula aterrizó en España, tras una visita a Portugal, retomando su agenda política internacional, con el objetivo de posicionar al país como un actor relevante en el escenario global y atraer inversiones. La agenda del Gobierno brasileiro se centra en atraer más inversiones a Brasil y fortalecer las relaciones con el empresariado europeo, en un momento en el que China se afianza como 1er inversor en Brasil, en los sectores de infraestructuras, energía, minería y comercio minorista, y el país se fortalece en las mesas de negociación con la Unión Europea, y ¿Cuál puede ser una oportunidad para los europeos, especialmente portugueses y españoles en esta agenda?