Curar a los pacientes y al planeta: el papel cada vez más importante de la asistencia sanitaria en el debate sobre la salud y el clima

  • Temáticas
    Sostenibilidad ESG
  • Sector
    Salud e Industria Farmacéutica
  • Países
    Estados Unidos
10 Jul 2025

Las conversaciones sobre el clima en todo el mundo han estado marcadas durante mucho tiempo por un intenso debate y duras condenas. Si bien las empresas de combustibles fósiles y los fabricantes industriales son los principales objetivos, el sector sanitario está ganando protagonismo en los debates sobre la salud y el clima.

Con sus instalaciones sanitarias de alto consumo energético y la compleja cadena de suministro de bienes y servicios necesarios para prestar asistencia, el sector se ha convertido en un actor importante en los debates sobre el cambio climático a nivel mundial y en un foco de atención para las soluciones de gestión medioambiental.

Ante el aumento de la regulación y el escrutinio público, las empresas sanitarias deben reconocer una doble prioridad, potencialmente contradictoria: curar a los pacientes y curar el planeta.

La realidad actual: el impacto medioambiental global de la sanidad

El sector sanitario tiene un impacto medioambiental global significativo, con una huella climática estimada equivalente al 4,4 % de las emisiones netas mundiales. Como afirmó la ONG internacional Health Care Without Harm en un informe de 2024, «si el sector sanitario fuera un país, sería el quinto mayor emisor del planeta».(1)

Estados Unidos lidera la lista de países con mayores emisiones de gases de efecto invernadero en el sector sanitario, con aproximadamente el 25 % de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero procedentes de la sanidad.(2) El sector sanitario también tiene un impacto desproporcionado dentro de Estados Unidos: con la electricidad y el gas natural como combustibles más utilizados, se estima que los edificios sanitarios estadounidenses representan el 9 % del consumo total de combustible de los edificios comerciales, pero solo el 4 % de la superficie comercial total.(3)

El impacto medioambiental del sector sanitario no solo afecta a la salud física: también contribuye al aumento del coste de la propia asistencia.

Los costes sanitarios estimados de la contaminación atmosférica y el cambio climático superan los 800 000 millones de dólares al año solo en EE. UU., mientras que el Banco Mundial estima que los costes sanitarios adicionales derivados del cambio climático en los países de renta baja y media ascenderán al menos a 21 billones de dólares en 2050. (4,5)

Desde el aumento de la demanda de enfermedades que requieren visitas a urgencias y atención hospitalaria hasta las interrupciones en las instalaciones relacionadas con el clima y la pérdida de productividad debido a las enfermedades, el sector sanitario se enfrenta cada vez más a condiciones ambientales que encarecen las operaciones diarias. Los problemas de salud relacionados con la exposición a la contaminación incluyen el cáncer, las enfermedades cardiovasculares, las enfermedades respiratorias y las enfermedades neurológicas, entre otros, con una estimación de 9 millones de muertes en todo el mundo. (6,7) En un sector que se esfuerza por ofrecer una atención basada en el valor, los efectos financieros de las afecciones de salud relacionadas con el clima obstaculizan el progreso.(8)

Aumento de los informes ESG

El creciente escrutinio normativo en torno al impacto medioambiental se suma al reto de equilibrar las necesidades de atención al paciente con las iniciativas de sostenibilidad. La obligación de informar sobre el rendimiento en materia de ESG, independientemente del sector empresarial, es una tendencia mundial en auge, con la Directiva sobre información corporativa en materia de sostenibilidad (CSRD) de la UE como ejemplo destacado. La ley exige a las empresas de la UE, incluidas las filiales de empresas no pertenecientes a la UE que cumplan los requisitos, que divulguen su impacto medioambiental y social y cómo las medidas relacionadas con los criterios ESG afectan a sus actividades. El Reino Unido, México, China y muchos otros países también han promulgado leyes que obligan a presentar informes.

El marco regulatorio en los Estados Unidos sigue evolucionando, y las recientes sentencias del Tribunal Supremo de los Estados Unidos apuntan a un panorama de cumplimiento cada vez más fragmentado y a una tendencia a limitar la autoridad federal en materia medioambiental. Aunque la mayoría de las empresas sanitarias no alcanzan los niveles de emisiones exigidos para la presentación de informes federales obligatorios en virtud del Programa de Notificación de Gases de Efecto Invernadero de la EPA, pueden estar sujetas a las disposiciones de la Ley de Aire Limpio y la Ley de Conservación y Recuperación de Recursos, así como a las normas de la OSHA relacionadas con las emisiones y la gestión de residuos peligrosos. Las leyes estatales sobre emisiones siguen variando en todo el país, pero ninguna se refiere específicamente a los hospitales o los sistemas sanitarios ni obliga directamente a los hospitales a presentar informes ESG. Mientras que algunos estados están avanzando en la divulgación obligatoria y la transparencia sobre el riesgo climático, otros se han alejado de las obligaciones ESG o incluso las han prohibido en la contratación o la inversión estatal.

Específico para las empresas públicas, pero digno de seguimiento por sus posibles implicaciones para el sector en general: la norma de divulgación climática de 2024 de la Comisión de Bolsa y Valores de EE. UU. (SEC). Tras enfrentarse a crecientes retos legales, que habrían obligado a las empresas públicas a divulgar determinados riesgos relacionados con los criterios ESG a los inversores, la norma propuesta está actualmente suspendida (no se aplica). Sin embargo, las empresas sanitarias siguen estando sujetas a los requisitos de divulgación de riesgos significativos de la SEC.

Aumento del interés público: pacientes, proveedores e inversores

El creciente interés público por la salud climática acompaña a este panorama normativo cambiante. La sostenibilidad es importante para las partes interesadas en la asistencia sanitaria, desde los pacientes y los proveedores hasta los inversores. El 61 % de los estadounidenses quiere aprender a proteger su salud de los efectos adversos del clima, y el 69 % confía en los profesionales sanitarios para obtener información sobre la salud climática (9). Los profesionales sanitarios están de acuerdo. Un reciente estudio nacional realizado a más de 1000 médicos reveló que aproximadamente cuatro de cada cinco médicos encuestados creen que es importante que su hospital aborde el cambio climático y que hacerlo está en consonancia con la misión de su organización.(10) Además, la mayoría de los encuestados también afirmó que los esfuerzos de una organización por reducir su impacto medioambiental influirían en su decisión de permanecer en ella o marcharse a otra.(11) Dada la escasez de personal que sigue afectando al sector sanitario, estos sentimientos pueden empezar a cobrar más importancia que nunca.

Del mismo modo, el interés de los inversores por el sector sanitario sigue aumentando, al igual que las expectativas en materia de ESG. Un informe de 2022 que encuestó a inversores de Estados Unidos, Reino Unido y Canadá reveló que el 81 % creía que las empresas con un buen desempeño en materia de ESG merecían una valoración superior, y el 76 % creía que esas empresas eran más resistentes en una crisis. (12) Si bien el debate público sobre el cambio climático ha cuestionado si el interés por los criterios ESG es una moda o una nueva norma social, está claro que las partes interesadas del sector sanitario se están centrando en ellos.

Equilibrio entre la salud de los pacientes y el clima: la comunicación como ventaja competitiva

Con los costes, los resultados, el cumplimiento normativo y la opinión de las partes interesadas en juego, los líderes del sector sanitario están tomando medidas para reducir el impacto medioambiental. Están abordando los retos desde múltiples ángulos, incluyendo la optimización de las cadenas de suministro para reducir las emisiones de carbono y la transición hacia sistemas, tecnologías y equipos más eficientes desde el punto de vista energético.

Pero a medida que implementan soluciones operativas, los líderes del sector sanitario también deben hacer frente a un reto paralelo: comunicar su compromiso con una gestión medioambiental responsable en armonía con la seguridad y la calidad de los pacientes. Los líderes que consideran las estrategias de comunicación no solo como herramientas de mitigación de riesgos, sino también como palancas de crecimiento estratégico, pueden proyectar una propuesta de valor que resuene entre los pacientes, los proveedores, los inversores y los reguladores. El resultado: generar confianza, reforzar el valor de la marca e impulsar la resiliencia a largo plazo. Algunas estrategias incluyen:

1. Controlar el discurso con informes transparentes.

La presentación de informes proactivos y transparentes sobre las emisiones, las normas ESG y otras métricas de impacto medioambiental no solo satisface los intereses de las partes interesadas, sino que también diferencia a las empresas en el mercado. Otras pueden informar solo cuando lo exige la normativa, pero las empresas sanitarias que publican los resultados independientemente de la ley van más allá de la mera retórica sobre las iniciativas de salud climática. Afirman su responsabilidad.

Sin embargo, la transparencia no significa nada sin la comprensión del público. Las iniciativas de sostenibilidad pueden basarse en datos científicos complejos, por lo que desglosarlos para las partes interesadas en un lenguaje sencillo que puedan comprender ayuda a garantizar que tengan repercusión. Los informes para los inversores serán diferentes de los informes para la comunidad local; se utilizan los mismos parámetros, pero hay que tener cuidado de adaptarlos al lenguaje que puedan entender las partes interesadas a las que se dirigen.

2. Demostrar credibilidad con certificaciones voluntarias.

Las certificaciones voluntarias también pueden reafirmar el compromiso con la salud climática, al tiempo que proporcionan un marco estratégico para la implementación de iniciativas respetuosas con el medio ambiente. La agencia de acreditación sanitaria The Joint Commission lanzó en 2024 su Certificación de Salud Sostenible como una forma de que los hospitales estadounidenses mejoren sus esfuerzos en materia de sostenibilidad y, al mismo tiempo, obtengan el reconocimiento público de su compromiso. Las certificaciones Leadership in Energy and Environmental Design (LEED) y ENERGY STAR también ayudan a los líderes a demostrar la eficiencia energética y el ahorro de costes en línea con los objetivos ESG. Las empresas sanitarias que invierten en certificaciones pueden ver los beneficios tanto en sus resultados como en el valor de su marca.

3. Vincule los logros climáticos a los resultados de la atención sanitaria.

Aproveche el discurso destacando el liderazgo en energías renovables como un beneficio para la atención individual de los pacientes. Destaque cómo las prácticas sostenibles mejoran la atención al paciente, posicionando la inversión en iniciativas de impacto medioambiental como complementaria a la atención, y no en competencia con ella. Humanice los datos mostrando cómo la mejora de la calidad del aire gracias a la renovación de los sistemas de climatización ha aliviado los problemas respiratorios de los pacientes y el personal, o cómo las instalaciones de nuevo diseño ofrecen más luz natural y espacios verdes que ayudan a reducir el estrés y la ansiedad de los pacientes. Estos beneficios están directamente relacionados con las medidas de calidad y los objetivos de seguridad de los pacientes, lo que posiciona la acción climática como una palanca para ofrecer una atención de alta calidad, rentable y centrada en la persona.

4. Proteger la confianza mediante mensajes honestos.

Los líderes del sector sanitario deben elaborar mensajes teniendo en cuenta que las acusaciones de «greenwashing» pueden atraer la atención negativa de los medios de comunicación y socavar la confianza de los inversores, entre otras consecuencias. El uso de tácticas de relaciones públicas o marketing que embellecen o tergiversan el compromiso de una empresa sanitaria con la sostenibilidad pone en riesgo tanto su credibilidad como el cumplimiento de la ley federal en virtud de la Ley de la Comisión Federal de Comercio. Las Guías Verdes de la FTC también pueden ayudar a evitar afirmaciones medioambientales engañosas, ya que ofrecen un marco de auditoría para revisar los activos de comunicación, las políticas y los procesos en busca de indicadores de greenwashing. (13)

Además, comience teniendo en cuenta a sus partes interesadas, incorporando información respaldada por datos que complemente las afirmaciones basadas en hechos. Comprender el comportamiento y los sentimientos del público, ya sea a través de herramientas de análisis web y escucha social o mediante encuestas y grupos focales, puede ayudar a basar los mensajes en pruebas documentadas y mostrar lo que podría resonar en el público.

Centrarse en mensajes transparentes y basados en datos demostrará integridad y compromiso auténtico sin comprometer la reputación. Los líderes del sector sanitario que guíen a sus empresas a través de estos retos climáticos sin comprometer la atención sanitaria podrán sobrevivir. Pero aquellos que mejor comuniquen este progreso podrán generar la confianza y la credibilidad necesarias para prosperar.

 

(1) Health care’s climate footprint is equivalent to 4.4% of global net emissions
(2) Health Care Pollution And Public Health Damage In The United States: An Update | Health Affairs
(3) Commercial Buildings Energy Consumption Survey (CBECS)
(4) The Costs of Inaction: The Economic Burden of Fossil Fuels and Climate Change on Health in the United States (PDF)  
(5) Health and Climate Change
(6) Air Pollution and Your Health  
(7) Pollution and health: a progress update 
(8) Climate change and health care | Deloitte Insights 
(9) Americans Voice a Clear Call for Health Professionals to Lead on Climate
(10) U.S. Health Care Workers Want Their Employers to Address Climate Change
(11) The Commonwealth Fund
(12) 2022 Edelman Trust Barometer
(13). FTC Part 260: Guides for the use of environmental marketing claims

 

Bridget Haeg
U.S Corporate Affairs Director, Healthcare