¿Te imaginas vivir en un mundo donde la mayoría ya no pisa el campo?
En las últimas décadas, la movilidad humana ha estado regida por dos realidades relativamente estables.
Durante el último siglo, la movilidad humana ha estado marcada por dos fuerzas que han transformado el mundo: el éxodo rural hacia las ciudades y los desplazamientos internacionales hacia economías más prósperas. En 2008, por primera vez en la historia, la población urbana mundial superó a la rural: 3.450 millones de personas frente a 3.380 millones. Hoy más de 4.600 millones viven en ciudades, frente a 3.450 millones que aún permanecen en el mundo rural (World Bank, 2025).
Desde la Segunda Guerra Mundial, la humanidad se ha puesto en movimiento como nunca antes, con millones de personas cruzando fronteras en busca de seguridad o un futuro mejor. Estos flujos han tenido picos por guerras, hambrunas o crisis económicas. Aun así, el mundo sigue siendo más sedentario de lo que parece: alrededor del 97 % de la población vive en el país en el que nació y solo un 3 % lo hace en otro (Hein de Haas, 2024).
Esta realidad ha generado tensiones, pero también ha encendido motores de progreso. Las dinámicas migratorias han impulsado la innovación, han inspirado a emprendedores y han permitido que las empresas conquisten nuevos territorios, mientras las sociedades se adaptan a un pluralismo más diverso y lleno de energía transformadora.
Cuando alguien se mueve, no se desplaza solo una persona; se desencadenan transformaciones económicas, sociales y culturales tanto en los lugares de origen como en los de destino. Cada viaje reescribe mercados, desafía narrativas y altera el equilibrio del talento global.
En sintonía con el entorno The Next Mindset, este informe invita a mirar más allá de lo evidente y descubrir lo invisible detrás del movimiento. En esa capacidad de anticipar y reinterpretar los cambios puede residir la verdadera ventaja competitiva para empresas, gobiernos y organizaciones que aspiran a liderar en un mundo en constante transformación.
Este análisis funciona como un mapa de las oportunidades que los grandes movimientos humanos de la actualidad están abriendo a quienes estén dispuestos a abrazarlas. También invita a anticiparse a lo inesperado, identificando nuevos patrones y ventajas donde otros solo perciben incertidumbre.
El informe se estructura en cuatro ejes de exploración:
Cada viaje reescribe mercados, desafía narrativas y altera el equilibrio del talento global.
- EL MAPA DEL MOVIMIENTO Muestra cómo los grandes centros de poder —Estados Unidos, Europa y América Latina— viven y gestionan la movilidad humana bajo crecientes presiones políticas y sociales.
- LOS RESULTADOS DEL MOVIMIENTO Revela cómo estas dinámicas abren nuevos espacios de crecimiento en sectores como la banca, el consumo, el talento, el turismo, la educación o la sanidad.
- INDUSTRIAS EN MOVIMIENTO Evidencian cómo anticiparse a las tendencias puede marcar un tipping point en la trayectoria de una empresa.
- EL MOVIMIENTO DEL FUTURO: RADAR IA Analiza cómo se construyen y difunden las narrativas sobre migración.
Combina rigor ético y visión estratégica para interpretar cómo distintas regiones entienden la movilidad humana, aprovechando el potencial de la inteligencia artificial sin perder de vista su dimensión humana. Su desarrollo se apoyó en una selección diversa y rigurosa de fuentes, idiomas y contextos culturales, con el fin de ofrecer una lectura global que refleje los matices, tensiones y oportunidades de un fenómeno que redefine nuestro tiempo.
El mapa del movimiento
El impacto de la movilidad humana adopta formas distintas según el territorio. En Estados Unidos, Europa y América Latina, las políticas, los mercados y las percepciones sociales se reconfiguran a ritmos diferentes, pero todas comparten una misma certeza: nada permanece inmóvil.
¿Equilibrio o barrera? ¿Qué rumbo toma hoy la movilidad humana hacia EE. UU.?
Estados Unidos concentra tanto la atracción como la resistencia frente a la movilidad humana, en una dinámica de equilibrio que influye en decisiones políticas, empresariales y sociales...
Estados Unidos concentra tanto la atracción como la resistencia frente a la movilidad humana, en una dinámica de equilibrio que influye en decisiones políticas, empresariales y sociales. En abril de 2025, el saldo migratorio neto se redujo de cuatro millones de personas en 2023 a unas 600.000 (Pew Research, 2025), en gran parte por nuevas medidas de control fronterizo y requisitos adicionales en determinados visados (USCIS, 2025).
Estas regulaciones también generan efectos indirectos sobre sectores clave. El Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC, 2025) estima que los ingresos turísticos podrían disminuir en torno a USD 29.000 millones, mientras que el Instituto Internacional de Educación (IIE, 2025) prevé una reducción de hasta 150.000 matrículas internacionales, equivalente a unos USD 7.000 millones. Más allá del impacto económico inmediato, este escenario abre un debate sobre cómo sostener el flujo de talento global que ha sido históricamente una de las fuentes de innovación y competitividad del país.
En paralelo, sectores como la agroindustria, la construcción y la manufactura enfrentan déficits crecientes de trabajadores: el 73 % de los productores agrícolas reporta dificultades para contratar (USDA, 2025), casi medio millón de empleos manufactureros permanecen vacantes (BLS, 2025) y se estima que el cuidado de largo plazo requerirá 8,9 millones de empleos adicionales hacia 2032 (PHI, 2025). El envejecimiento poblacional y la baja natalidad han intensificado la dependencia del talento inmigrante, especialmente en cuidados y servicios sanitarios en zonas rurales. Para las empresas, este escenario presiona salarios, complica la inflación y exige transformar los déficits laborales en oportunidades de innovación e inversión.
Bridget Haeg
La movilidad humana es también un catalizador del emprendimiento. Más del 46 % de las compañías Fortune 500 fueron fundadas por inmigrantes o sus hijos, generando USD 8,6 billones en ingresos (AIC Special Report, 2025). Silicon Valley y otros polos tecnológicos son prueba de cómo los migrantes han impulsado la creación de empresas y el dinamismo del mercado. Sin embargo, nuevos requisitos, como el depósito de USD 100.000 para solicitantes de la visa H1B, reconfiguran el acceso de profesionales extranjeros altamente cualificados al mercado estadounidense.
Mike Huston
Las empresas también críticas de actores que perciben la movilidad como una amenaza a empleos o identidades culturales.
Al mismo tiempo, la migración se ha convertido en un campo de riesgo reputacional. Las empresas que emplean inmigrantes pueden fortalecer su diversidad y resiliencia, pero también enfrentan críticas de actores que perciben la movilidad como una amenaza a empleos o identidades culturales. En contraste, aquellas que se distancian de la fuerza laboral migrante pueden obtener protección política de corto plazo, pero arriesgan acusaciones de discriminación o desconexión con realidades económicas y demográficas. En este entorno polarizado, adaptar narrativas, gestionar tensiones y proteger la licencia social para operar se vuelve un imperativo estratégico.
¿Estamos ante una Europa que se protege o que se aísla?
En Europa, la movilidad está atravesada por un dilema estructural: la securitización de las fronteras frente a la necesidad de atraer mano de obra y talento en un...
En Europa, la movilidad está atravesada por un dilema estructural: la securitización de las fronteras frente a la necesidad de atraer mano de obra y talento en un contexto de envejecimiento demográfico y escasez laboral. El Pacto de Migración y Asilo de la UE, que entrará en vigor en 2026, refuerza controles biométricos y agiliza repatriaciones, incrementando en un 30 % las deportaciones en 2024 respecto al año anterior (Eurostat, 2025). Sin embargo, este esquema ha sido criticado por consolidar un modelo de “solidaridad a la carta”, que concentra la responsabilidad en los Estados de primera llegada —España, Italia y Grecia— mientras otros países del bloque asumen compromisos más limitados, incrementando la vulnerabilidad de los migrantes y reforzando tensiones internas-.
Manuela Sánchez
Al mismo tiempo, emergen políticas de apertura selectiva. El CEDEFOP Labour Shortages Index identifica carencias críticas en sanidad, cuidados, tecnologías de la información y construcción, con riesgo de pérdida de competitividad si no se abordan (CEDEFOP, 2024). España es un caso paradigmático: la inmigración ha contribuido con el 80 % del crecimiento económico de los últimos quince años (El País, Maqueda, 2025). En 2024, de los 515.000 nuevos empleos creados, 211.000 (41%) correspondieron a trabajadores extranjeros, que representan solo el 13,6 % del empleo total, pero sostienen sectores estratégicos como la hostelería, los cuidados y la construcción (BBVA Research, 2024). El Banco de España y el FMI destacan que esta dinámica explica en buena parte que el país haya crecido un 3,2 % del PIB en 2024, por encima de la media europea (IMF, 2025). Incluso Italia, que está llevando a cabo duras políticas hacia los ilegales y los peticionarios de asilo, ha iniciado planes para la recepción de 500.000 inmigrantes temporales legales.
Además, la Comisión Europea ha promovido esquemas de “asilo académico” para investigadores y estudiantes (CE, 2025). España, en particular, se ha consolidado como nodo de atracción para talento latinoamericano, que ya representa el 28% de su población universitaria extranjera (Ministerio de Universidades, 2024). “Ante el envejecimiento demográfico, la inmigración cualificada es un factor de competitividad. La población activa podría decrecer menos o incluso estabilizarse si se incrementa la empleabilidad de colectivos subrepresentados —mujeres, mayores de 55 años o jóvenes con baja cualificación—, pero sin migración la ecuación es insostenible” (Biagi et al., 2025; Ueffing et al., 2025).
España es un caso paradigmático: la inmigración ha contribuido con el 80 % del crecimiento económico de los últimos quince años
Así, cuando alguien llega a Europa, no solo se mueve una persona: se transforman ecosistemas de innovación, se diversifica la base de consumidores y se tensan las políticas sociales. Para las empresas, el reto es gestionar narrativas en sociedades polarizadas, pero también la oportunidad de posicionarse como aliadas en la integración cultural y la construcción de un modelo competitivo más diverso y sostenible.
Juan Pablo Santangelo
¿Cómo puede América Latina ser origen, tránsito y destino al mismo tiempo?
En América Latina, la movilidad humana es multidireccional: origen, tránsito, destino y retorno conviven en un mismo territorio. En 2023, la región registró 47...
En América Latina, la movilidad humana es multidireccional: origen, tránsito, destino y retorno conviven en un mismo territorio. En 2023, la región registró 47 millones de nuevos desplazamientos, alcanzando un total de 75,9 millones de personas en situación de desplazamiento interno (IDMC, 2024).
COLOMBIA
Colombia atraviesa uno de los capítulos más intensos de movilidad humana en la región. Según la ONU, cerca del 6 % de la población está conformada por migrantes de distintos orígenes (OIM, 2024). En solo cinco años, más de 2,8 millones de venezolanos han llegado al país, configurando la mayor ola migratoria de la historia reciente (Cortés, OIM, 2024). Este flujo ha puesto en tensión la capacidad institucional en salud, educación y vivienda, pero también ha generado un impacto económico tangible. El gran desafío ahora es cómo integrar, generar oportunidades y convertir este movimiento humano en una fuerza que impulse el futuro del país.
La movilidad también está reconfigurando el mapa social y urbano. Ciudades fronterizas medianas se han transformado en espacios de integración y resiliencia, donde conviven la presión del empleo informal con el surgimiento de nuevos emprendimientos y comercios que aportan diversidad cultural y revitalizan comunidades.
Aunque buena parte de la población migrante sigue en la informalidad, el mercado laboral refleja una transición con cada vez más acceso a sectores como la agroindustria, la logística, la construcción y los servicios. Por lo cual, el reto en Colombia no es administrar la movilidad como una crisis coyuntural, sino reconocerla como una oportunidad histórica para rediseñar el tejido social, laboral y reputacional, convirtiéndola en motor de innovación y legitimidad.
María C. Géneco
MÉXICO
Las remesas hacia México registraron una caída del 4,6 % en mayo de 2025 respecto al mismo mes del año anterior (Banco de México, 2025) y, a partir de 2026, estarán sujetas a un impuesto del 1 %. Esta medida impactará de manera directa a regiones donde estos flujos representan más del 10 % del PIB. Paralelamente, el país se consolida como territorio de tránsito hacia Estados Unidos, lo que ha dinamizado industrias como el transporte, la seguridad privada y los servicios humanitarios.
El gobierno de Claudia Sheinbaum adoptó un enfoque humanista con la estrategia México te Abraza
La movilidad humana en México atraviesa una etapa de redefinición que afecta tanto la política pública como los marcos regulatorios. Mientras la administración estadounidense de Donald Trump reactivó medidas restrictivas como Quédate en México, el gobierno de Claudia Sheinbaum adoptó un enfoque humanista con la estrategia México te Abraza, orientada a la atención de repatriados y al fortalecimiento de la red consular. Entre sus resultados, destaca la reducción del 91 % en los encuentros migratorios en la frontera norte entre octubre de 2024 y agosto de 2025, un cambio estructural en la gestión de flujos.
En paralelo, el país discute reformas legales para responder a nuevas tensiones. Entre ellas, la posible modificación de la Ley de Migración y la Ley General de Población, que incluiría disposiciones para cancelar residencias a extranjeros que incurran en actos de discriminación o abuso. Asimismo, se proyecta la modernización de los lineamientos de visas —la primera en más de una década— con el fin de agilizar trámites y articular mejor la política migratoria con la actividad turística, de cara a la Copa Mundial de 2026.
No obstante, persisten retos que afectan la competitividad. En 2024 se registraron más de 100.000 rechazos a visitantes extranjeros en aeropuertos mexicanos, principalmente de Colombia y Brasil, lo que generó tensiones diplomáticas y afectó la reputación del país como destino turístico y de negocios. Estos episodios han impulsado la instalación de mesas bilaterales y han puesto sobre la mesa la necesidad de procesos migratorios más transparentes, confiables y respetuosos.
Para el sector privado, la movilidad también abre espacios estratégicos. La plataforma Conexión Empresarial Paisano, que concentra cerca de 64.000 empleos ofertados por 220 compañías mexicanas, evidencia cómo la reinserción de migrantes retornados puede cubrir déficits de talento y reforzar la legitimidad corporativa. Integrar políticas inclusivas y narrativas responsables permitirá a las empresas no solo adaptarse a un marco regulatorio en transformación, sino también consolidarse como actores clave en la construcción de soluciones sostenibles en un país definido por el movimiento constante de personas.
Fernando García
PERÚ
El Perú se ha consolidado como el segundo país receptor de población venezolana en la región, con más de 1,5 millones de personas, equivalente al 3 % de la población total (OIM, 2024). Este flujo ha generado impactos multidimensionales: en lo político, ha tensionado los marcos normativos y las capacidades institucionales de gestión; en lo económico, ha producido un efecto mixto de dinamización y precariedad laboral; y en lo social, ha puesto a prueba la cohesión comunitaria.
Un dato clave revela que, por cada sol invertido en atender a la población migrante y refugiada, el Perú recibió 2,6 soles de retorno fiscal entre 2018 y 2022 (Banco Mundial & ACNUR, 2023), confirmando que la movilidad no solo es un desafío, sino también una inversión productiva. Este enfoque conecta con The Next Mindset de LLYC: la reputación institucional y empresarial dependerá de la capacidad de anticipar y gestionar narrativas en un contexto donde la opinión pública oscila entre la percepción de amenaza y la visión de oportunidad.
Por cada sol invertido en atender a la población migrante y refugiada, el Perú recibió 2,6 soles de retorno fiscal entre 2018 y 2022.
El impacto sectorial es evidente en retail y gastronomía: Lima, Arequipa y Trujillo han visto surgir clústeres como “La Pequeña Caracas”, que diversifican la oferta y dinamizan la economía local. Según el Banco Mundial y ACNUR, el 70 % de la población venezolana en Perú está en edad laboral y sus niveles educativos superan a los de la población local, lo que constituye un capital humano estratégico aún subutilizado. La movilidad, por tanto, no solo incrementa la demanda, sino que amplía ecosistemas de negocio y abre espacios de innovación y expansión.
Martín Díaz
Además, el cambio climático redefine la movilidad en la región. Entre 44 y 216 millones de personas podrían desplazarse dentro de sus países por motivos ambientales en las próximas dos décadas (Banco Mundial, 2025). Esto moverá también los mapas urbanos, los precios del suelo y las prioridades de inversión.
Los resultados del movimiento
¿Qué se mueve cuando se mueven las personas? Los mercados, el talento, las ciudades y la macroeconomía, entre otras.
Cuando alguien se mueve, se mueven los mercados.
Cada desplazamiento humano genera nuevas demandas de bienes y servicios. Las comunidades migrantes traen consigo hábitos de consumo propios, expanden nichos de mercado e impulsan la diversificación de la oferta. La movilidad impacta directamente en la forma en que las empresas diseñan productos y servicios. Pero también reconfigura el propio ecosistema empresarial gracias a un rasgo primordial: los humanos que se mueven tienden a ser más emprendedores. También los que regresan tras emigrar.
De acuerdo con un estudio que analizó 69 países, los inmigrantes tienden a ser emprendedores en mayor medida que los locales. En Estados Unidos, donde un 13,7 % de la población ha nacido en el extranjero, los inmigrantes representan el 20,2 % de los autoempleados y el 25 % de los creadores de startups (Harvard Business Review, 2021)
Pero los inmigrantes no solo reconfiguran los mercados de sus países de destino, sino también los de origen.
Un estudio reciente del Center for Economic Policy Research explicaba cómo trabajadores poco cualificados de países pobres del sudeste asiático como Bangladesh, que tienen dificultades para acceder al crédito, asumen grandes costes para viajar a países más ricos. En el caso de Bangladesh, con frecuencia, los de la Península Arábiga. Se trata de una decisión de alto riesgo. Pero una vez allí, para los humanos en movimiento, trabajar en sectores como la construcción o los servicios puede ofrecer grandes rendimientos a los migrantes. Muchos de estos regresan a zonas rurales o semi-urbanas de Bangladesh. Y una cantidad muy significativa de ellos se convierte en trabajadores por cuenta propia o emprendedores: si un 30 % de ellos lo era a su partida, un 60 % lo es tras su regreso gracias a la posibilidad de invertir los ahorros conseguidos en el extranjero en la apertura de un negocio o la adquisición de una licencia de taxi.
Tras ello, de media, consiguen ingresos más elevados que empleados por cuenta ajena de una cualificación similar y constituyen una parte notable del emprendedurismo de un país que lo necesita (CEPR, 2024)
Mientras los medios europeos enfatizan la palabra “crisis” en el 42% de las menciones sobre migración, Radar IA identificó un crecimiento del 33% en las referencias a “innovación” y “diversidad” como oportunidades económicas.
Cuando alguien se mueve, se mueven las ciudades.
Las urbes receptoras se transforman aceleradamente: aumenta la presión sobre vivienda, transporte y servicios públicos, pero también surgen oportunidades de innovación urbana. En algunos casos, los trabajadores migrantes están más dispuestos a asumir los sacrificios que implica vivir en ciudades con alto nivel de vida que los locales.
Edward Glaeser, uno de los mayores expertos en economía urbana y autor de “El triunfo de las ciudades”, ha afirmado que: “los inmigrantes son buenos para las ciudades y las ciudades son buenas para los inmigrantes”. En uno de sus estudios clásicos, Cities and Skills, investigó las razones objetivas por las cuales los salarios son más altos en los entornos urbanos; en el momento de escribir su artículo, en Estados Unidos, un 32 % más altos. Su conclusión fue que, aunque las ciudades aumentan la productividad de las personas por la cercanía geográfica y el efecto de coordinación, la razón que explica en mayor medida la “prima salarial” de las ciudades es la acumulación de habilidades que se produce en ellas, debido a que las personas que viven en entornos urbanos aprenden con mucha más rapidez que quienes lo hacen en entornos rurales. Esto conduce a un aumento de la productividad y, por lo tanto, de los salarios. Y en ello tienen un papel preponderante quienes se incorporan a las ciudades, sean procedentes del entorno rural o de otros países (Econpapers, 2001).
Un trabajo más reciente, “Why Immigration is an Urban Phenomenon”, Joan Monràs, catedrático de economía de la Universitat Pompeu Fabra, establecía que los inmigrantes, en contra de la aparente lógica, tienden a establecerse en ciudades de un elevado coste de vida. La razón principal, decía Monràs es que los inmigrantes con frecuencia mandan una parte significativa de sus ingresos a su país de origen. “En consecuencia, valoran los elevados sueldos de la ciudad y se sienten menos desincentivados por los altos costes de vida que los trabajadores locales” (Federal Reserve Bank of San Francisco, 2023).
Radar IA detectó un desplazamiento del eje "crisis humanitaria" hacia "movilidad productiva", con un aumento del 45% en menciones que vinculan migración con "emprendimiento" y "contribución económica".
Cuando alguien se mueve, se mueve el talento.
Los flujos migratorios modifican la disponibilidad de mano de obra en sectores clave, creando desequilibrios que, a su vez, impulsan la transferencia de conocimientos y obligan a repensar la gestión del capital humano.
Prithwiraj Choudhury, profesor de organización del comportamiento de la London School of Economics, considerado por Forbes como uno de los 50 mayores especialistas en el futuro del trabajo, publicó recientemente un estudio sobre las interacciones entre los migrantes y los residentes locales de sus lugares de destino. El estudio, “Bounded Solidarity: The Role of Migrants in Shaping Entrepreneurial Ventures”, principalmente analizaba si los inmigrantes compiten por las mismas oportunidades que los locales o, por el contrario, aportan diferencias que generan valor compartido.
El experimento consistió en comparar los proyectos de emprendimiento que surgían entre grupos formados solamente por originarios de la ciudad y otros que mezclaban locales con inmigrantes procedentes de otras partes del país y de regiones más lejanas como Japón, Oriente Medio y África. El resultado fue claro: cuando un inmigrante y un local colaboran, surgen ideas más sociales que entre dos locales. Estas podían incluir la creación de empresas tecnológicas, como por ejemplo el proyecto de utilizar drones para fortalecer la seguridad de escuelas locales, fruto de la interacción entre un inmigrante con background en el mundo tecnológico y un profesor preocupado por la violencia escolar. O la apertura de un bar especializado en bebidas no alcohólicas, fruto de la interacción entre un inmigrante con experiencia en el mundo de la hostelería y un activista local preocupado por los niveles de alcoholismo en la ciudad. (Scheller College of Business, 2024). El nuevo talento actúa como catalizador para el desarrollo del talento local.
En Australia, por ejemplo, el sector de la Energía, la Minería y la Propiedad depende en gran medida de talento inmigrante de alta cualificación, que en algunos casos puede llegar a suponer dos tercios de la mano de obra. Esta dependencia ha hecho que en momentos de baja inmigración (como los años de la pandemia) el sector se enfrentará al reto de atraer todo el talento que necesitaba. De acuerdo con un estudio de KPMG, cerrar esa clase de brechas pasa, además de por reformas de carácter legal, por un reforzamiento de las políticas de diversidad e inclusión en las propias empresas, dado que muchas de de ellas siguen llevando a cabo políticas discriminatorias incluso cuando hay escasez de talento: los solicitantes de trabajo con un nombre no inglés, por ejemplo, tenían un 60% menos de probabilidades de recibir una respuesta positiva. Y casi el 25% de los migrantes con altas habilidades desempeñaban trabajos por debajo de su cualificación (KPMG, 2023)
Las asociaciones más frecuentes entre "talento migrante" e "innovación" en la conversación digital, sugieren un cambio de paradigma: la movilidad se percibe menos como fuga y más como transferencia de conocimiento.
Cuando alguien se mueve, se mueve la estructura de la economía.
La movilidad humana se ha convertido en un determinante macroeconómico. Además del consumo y la estructura empresarial, afecta al cuadro macroeconómico de los países (deuda, sostenibilidad fiscal, pensiones, servicios públicos). En algunos países, además, las remesas internacionales son mayores que la inversión internacional.
En Europa, por ejemplo, a pesar de un escaso crecimiento económico, dice la investigación “A changing European labour market: the role of immigration and new jobs”, de CaixaBank Research, se han creado 7,2 millones de empleos desde 2019 hasta 2024. Eso ha dado pie a unos índices históricamente bajos de desempleo.
De acuerdo con la investigación, casi la mitad de esos empleos, 3,2 millones, los han ocupado trabajadores procedentes de fuera de la Unión Europea, a pesar de que estos representan solamente un 6,6% de la fuerza laboral de esta. Según un estudio del Banco Central Europeo, este aumento de la población extranjera en edad de trabajar, y su mayor tasa de empleo, han sido uno de los principales factores del crecimiento de la actividad económica de la zona euro en 2023 y 2025.
En paralelo, se ha producido otro fenómeno con impacto en los mercados laborales europeos: a pesar de que los trabajadores extranjeros siguen estando sobrecualificados para los trabajos que acaban desarrollando, esa brecha se ha reducido en los últimos años, lo que ha permitido un aumento de la actividad en sectores de mayor valor añadido (Caixabank, 2025).
En Estados Unidos, el cambio en las políticas migratorias permitió al Banco de la Reserva Federal de Dallas hacer un estudio comparativo. “La inmigración ilegal aumentó drásticamente en los años 2021-2024, pero desde entonces ha descendido abruptamente, lo que ha tenido implicaciones negativas para el crecimiento económico. Estimaciones basadas en datos históricos y un modelo de autorregresión vectorial sugiere que el crecimiento del producto interior bruto de 2025 es entre el 0,75 % y el 1 % inferior que una simulación de referencia”. El estudio también establecía que el aumento de la inmigración ilegal no solo aumentaba el PIB, sino que no tenía impacto relevante en la inflación (Federal Reserve Bank of Dallas, 2025)
Las conversaciones digitales asocian la palabra "migrante" con términos como "trabajo digno" y "oportunidad" en un 68% de los casos, pero también con "informalidad" y "exclusión" en un 21%.
Industrias en movimiento
Cuando las personas se mueven, también lo hacen los mercados. Cada flujo humano transforma cadenas de valor, crea nuevos hábitos de consumo y redefine sectores enteros. La movilidad impulsa innovación en la banca, la educación, la salud o el turismo, y convierte a las empresas en protagonistas de un cambio global que trasciende fronteras. Entender estas dinámicas no es solo adaptarse: es anticipar hacia dónde se moverá la oportunidad.
Servicios financieros y banca
Las remesas ya superan la inversión extranjera en países como México y Colombia. Esto abre espacio para productos financieros innovadores: cuentas multi-moneda, créditos para migrantes, seguros de viaje y salud internacional, y fintech diseñadas para diásporas. Oportunidad para alianzas entre bancos tradicionales y plataformas digitales que reduzcan costos de envío y capturen confianza de comunidades migrantes.
Oportunidades directas: fintech, banca minorista, seguros, inversión social ligada a diásporas.
Se detectó un aumento del 48% en las menciones positivas sobre "remesas digitales" y "banca para migrantes" en conversaciones en línea entre 2023 y 2025. La narrativa dominante asocia las fintech con "autonomía" y "acceso", mientras que los bancos tradicionales siguen vinculados a "burocracia" y "costos altos".
Agroindustria, exportación e importación
Migrantes reproducen y expanden sus patrones de consumo alimenticio, creando nuevos nichos para importación/exportación (ejemplo: crecimiento de restaurantes venezolanos en Colombia o productos mexicanos en EE. UU.). La escasez de mano de obra en agricultura en EE. UU. y Europa también acelera la automatización agrícola, pero deja espacio para programas de migración laboral regulada.
Oportunidades directas: retail alimentario, agritech, logística, comercio internacional de alimentos.
Las conversaciones sobre productos vinculados a comunidades migrantes crecieron 35% en redes regionales desde 2024, con picos en torno a palabras como "sabor", "raíces" y "autenticidad". Se identifica adicionalmente que más del 60% de los mensajes sobre productos alimenticios de origen migrante se relacionan con identidad cultural.
Turismo y viajes de negocios
Restricciones migratorias en EE. UU. implican pérdidas para el turismo tradicional, pero abren oportunidades para destinos alternativos en Latinoamérica y Europa que se posicionan como hubs inclusivos. Aumenta el turismo de diáspora: personas que viajan a visitar familias o comunidades, generando demanda en aerolíneas, hoteles y plataformas digitales. Crece el turismo académico y médico: movilidad por educación y salud.
Oportunidades directas: aerolíneas, hoteles, seguros de viaje, turismo médico y académico.
Entre 2023 y 2025, las menciones sobre "viajar para reencontrarse" o "turismo de raíces" crecieron 41%. Las conversaciones con tono positivo sobre turismo médico y educativo superan en 28% a las relacionadas con turismo de placer.
Educación global
La reducción de visados en EE. UU. crea espacio para universidades de Europa y América Latina que capturen estudiantes internacionales, especialmente en España y México. Expansión del aprendizaje online transnacional: universidades ofreciendo programas híbridos a estudiantes que no pueden migrar físicamente.
Oportunidades directas: educación superior, edtech, enseñanza de idiomas, seguros estudiantiles.
España y México concentran el mayor volumen de conversación en español sobre movilidad académica. El 67% de los mensajes con sentimiento positivo alude a "acceso" y "transformación personal", mientras que el 23% menciona "trámites" o "barreras migratorias" como obstáculos.
Salud y cuidados
La migración masiva presiona los sistemas sanitarios, pero abre oportunidades para clínicas privadas, seguros internacionales y telemedicina dirigida a comunidades migrantes. En Estados Unidos, la agricultura y la construcción dependen en gran medida de trabajadores migrantes, mientras que en el ámbito sanitario los migrantes representan una proporción significativa y creciente de la fuerza laboral, especialmente en los cuidados de largo plazo y en zonas rurales o desatendidas. En España, la mano de obra migrante sostiene buena parte del sistema de cuidados y la sanidad.
Bridget Haeg
Oportunidades directas: sanidad privada, telemedicina, seguros de salud, plataformas de empleo para cuidadores.
En Europa y América Latina, las menciones sobre "telemedicina" vinculadas a migración aumentaron 62%, sugiriendo que la salud se convierte en un vector de integración y confianza.
Talento humano y trabajo
Migración como fuente de diversidad y complementariedad de talento: perfiles altamente calificados que nutren innovación y startups. Déficit en sectores como agricultura, construcción y cuidados. Oportunidad de modelos de contratación circular (programas temporales) y soluciones digitales de matching laboral.
Hoy las trayectorias profesionales ya no son lineales, sino migratorias: las personas se mueven entre países, sectores y culturas, aportando diversidad y también la incertidumbre de lo transitorio. Más de 45 millones de latinoamericanos viven fuera de sus países de origen y cerca de 5 millones se desplazan cada año dentro de la región (ONU). En mercados como Colombia, Chile o México, estas comunidades están transformando los mercados laborales y la vida interna de las compañías. La evidencia muestra que los equipos diversos superan hasta en un 36% los resultados de los menos diversos (McKinsey, 2020). La clave está en dejar de entender la retención como permanencia y verla como el máximo aprovechamiento del talento mientras permanece.
María C. Géneco
Oportunidades directas: consultoría de RR. HH., reclutamiento digital, educación técnica, innovación empresarial.
Las palabras más asociadas a "equipos diversos" son "creatividad", "rendimiento" y "aprendizaje". Las menciones negativas se concentran en temas de "inestabilidad" y "precariedad". Los mensajes empresariales que destacan "aprendizaje intercultural" obtienen 3,5 veces más interacciones positivas.
Ciudades, urbanismo y construcción
La llegada de migrantes presiona servicios básicos, pero también dinamiza mercados inmobiliarios (alquiler, vivienda social, construcción modular). La migración climática obliga a diseñar infraestructuras resilientes y nuevas formas de urbanismo sostenible.
En países como España hay una necesidad de mano de obra muy acuciante en el sector de la construcción. Según la Encuesta EBAE, el 56% de las empresas del sector construcción declara tener dificultades para encontrar trabajadores adecuados. Este porcentaje es uno de los más altos entre todos los sectores, solo superado por hostelería (60%) y agricultura (57%). En términos generales, la migración actúa como factor compensador ya que la carencia de profesionales podría cubrirse, de manera parcial, con la llegada de migrantes.
Oportunidades directas: construcción, real estate, transporte público, smart cities.
Los discursos sobre migración urbana han pasado de centrarse en "presión de servicios" (tendencia 2023) a "revitalización local" (tendencia 2025). Las menciones a "barrios multiculturales" con tono positivo crecieron 49%, mientras que las que asocian "migración" a "crisis habitacional" cayeron 15%.
Cambio climático y resiliencia
El desplazamiento climático (44-216 millones de personas en dos décadas) será motor de demanda en seguros, energías renovables, urbanismo y gestión del agua. Las empresas que anticipen estos desplazamientos podrán posicionarse como aliadas de resiliencia climática.
Oportunidades directas: aseguradoras, energías renovables, consultoría de sostenibilidad, desarrollo urbano.
Las menciones sobre "refugiados climáticos" aumentaron 56% desde 2023, con mayor concentración en Sudamérica y África. Las asociaciones entre "movilidad humana" y "resiliencia" crecieron 27%, evidenciando una narrativa que empieza a conectar desplazamiento y sostenibilidad.
Cultura, entretenimiento y medios
La diversidad cultural crea nuevas industrias creativas (gastronomía, música, moda) y abre mercados de consumo cultural. El entretenimiento global se expande gracias a narrativas de diáspora y diversidad, oportunidad de contenidos transnacionales para cine, streaming, publicidad. A ello se suma un reto latente de alcance global: la integración. Más que un desafío sectorial, se trata de un eje transversal que impacta a todas las industrias. Algunas compañías tecnológicas y redes sociales han comenzado a explorar modelos de negocio más inclusivos y diversos, mostrando que la integración no solo es una exigencia ética, sino también un campo de innovación.
Manuela Sanchez
Oportunidades directas: industrias culturales, medios de comunicación, marketing inclusivo, plataformas digitales.
En el ecosistema mediático, el término "narrativas de diáspora" creció 47%, especialmente en contenidos audiovisuales y de moda. Las producciones que integran personajes migrantes o temáticas interculturales obtienen 1,8 veces más engagement en redes sociales.
Comercio y cadenas globales de valor
La migración conecta territorios y abre rutas de importación e exportación impulsadas por comunidades transnacionales. Diásporas actúan como puentes comerciales y culturales, generando oportunidades para marcas que quieran expandirse.
Oportunidades directas: comercio exterior, logística, e-commerce transnacional.
En México predomina el relato de "retorno y arraigo", en Perú el de "integración económica", y en Colombia el de "resiliencia social". Estas diferencias reflejan los contextos políticos y mediáticos que amplifican la conversación.
Innovación y data
Cada flujo migratorio genera enormes volúmenes de datos sobre movilidad, consumo, integración y riesgos. Empresas que sepan analizar, cruzar y anticipar tendencias migratorias con big data e IA podrán desarrollar productos predictivos para gobiernos, bancos, universidades y aseguradoras.
Oportunidades directas: data analytics, inteligencia artificial, consultoría estratégica, marketing predictivo.
Las organizaciones con estrategias narrativas inclusivas reducen en 32% las menciones negativas asociadas a su marca. Este hallazgo sugiere que anticipar y gestionar discursos puede ser tan relevante como diseñar políticas.
Historias en movimiento
La movilidad humana cobra sentido cuando se mira de cerca. Detrás de cada desplazamiento hay personas que transforman los lugares a los que llegan: crean, emprenden, enseñan, reinventan. En esas trayectorias individuales se dibuja una fuerza colectiva capaz de reconfigurar economías, inspirar innovación y reconstruir vínculos sociales. Son historias que muestran que moverse no solo es cambiar de lugar, sino abrir nuevas posibilidades de futuro.
Retail y gastronomía en Perú por la migración venezolana. Un fenómeno estructural convertido en oportunidad.
Desde 2016, Perú se ha convertido en el segundo país receptor de población venezolana en América Latina, con más de 1,5 millones de migrantes, equivalentes al 3% de la población nacional (OIM, 2024). Lo que inicialmente fue percibido como una presión sobre los servicios públicos terminó generando un fenómeno económico y cultural de transformación. En ciudades como Lima, Arequipa y Trujillo, la llegada masiva de migrantes impulsó una ola de emprendimientos gastronómicos, bodegas y servicios urbanos que reconfiguraron el tejido comercial. La gastronomía (símbolo de identidad peruana) se convirtió también en un terreno viable para la integración económica y social.
El problema: tensiones entre dinamismo e informalidad
La llegada masiva de migrantes venezolanos generó tensiones en el sector comercial peruano. Muchos competidores locales vieron amenazadas sus ventas. La informalidad laboral de algunos negocios migrantes (baja tributación, falta de registro sanitario) alimentó una percepción negativa y aumentó los discursos xenófobos en redes sociales.
En paralelo, el sector gastronómico tradicional enfrentaba una presión creciente por parte de un nuevo tipo de oferta: comida venezolana informal (areperas, carritos callejeros, negocios familiares) con precios muy competitivos. La respuesta inicial fue defensiva, pero progresivamente, se dieron cuenta de que los nuevos actores también traían innovación, demanda y cultura.
La estrategia: adaptación, diversidad y sinergias
Adaptación comercial
cadenas de supermercados y tiendas de conveniencia comenzaron a ajustar los productos que ponían a la venta, incorporando productos venezolanos (harina PAN, condimentos, bebidas y snacks tradicionales). Esto respondió tanto a la demanda migrante como a la curiosidad del consumidor peruano (OIM Perú (2023). Informe sobre integración socioeconómica de la población venezolana en el Perú).
Diversificación gastronómica
surgieron clústeres culinarios como “La Pequeña Caracas” en Lima, donde emprendedores venezolanos y peruanos mezclaron saberes culinarios, formatos y experiencias. La cocina migrante se transformó en una marca cultural con alto valor simbólico y económico.
Alianzas institucionales
programas apoyados por ACNUR, el Banco Mundial y municipalidades impulsaron la formalización de pequeños negocios, acceso a microcréditos y formación técnica, integrando la movilidad dentro de la economía formal, tales como el Programa de Emprendimiento Innovador para Refugiados y Migrantes (PEIREM), y el programa Vives Emprendes.
Resultados: la movilidad como fuerza productiva
Los resultados más evidentes fueron:
- 2,6 soles de retorno fiscal por cada sol invertido en atención a la población migrante (Banco Mundial & ACNUR, 2024).
- Crecimiento del empleo urbano informal en un 14% vinculado a negocios de origen migrante, con una tendencia posterior hacia la formalización.
- Expansión del consumo multicultural: aumento del 22% en la venta de productos venezolanos y de 18% en la apertura de nuevos restaurantes de comida fusión.
- Reactivación de zonas urbanas antes deprimidas, convertidas en corredores comerciales diversos como el ‘barrio chamo’ en San Juan de Lurigancho, los ejes Antúnez de Mayolo/Las Palmeras en Los Olivos, o microcorredores en Surco con minimarkets y restaurantes venezolanos que atraen tanto a diásporas como a consumidores locales.
Estos resultados reflejan cómo la movilidad humana puede convertirse en un vector de desarrollo inclusivo, si existe un ecosistema receptivo que traduzca diversidad en innovación.
Lecciones y aprendizajes
Las lecciones que nos ofrece el caso gastronómico y comercial de venezolanos en Perú nos ofrece algunas lecciones, como:
- La movilidad es un activo económico: cuando los migrantes acceden a herramientas financieras, formativas y regulatorias, el retorno fiscal y social es positivo.
- La diversidad impulsa la innovación comercial: las empresas que reconocen y se adaptan a nuevos patrones culturales de consumo logran diferenciarse en mercados saturados.
- La integración requiere gobernanza compartida: políticas públicas, banca, gremios y organismos internacionales deben actuar coordinadamente para transformar la movilidad en inclusión productiva.
- La reputación se construye desde la empatía: las marcas que promueven la convivencia y la diversidad obtienen legitimidad en sociedades polarizadas.
Innovación financiera impulsada por diásporas en México. Un país sostenido por el dinero que cruza fronteras.
México es el segundo mayor receptor de remesas del mundo, solo detrás de India. En 2024, las remesas representaron más del 4 % del PIB nacional, superando incluso a la inversión extranjera directa (Banco de México, 2025). Más de 40 millones de mexicanos y sus descendientes viven fuera del país, la mayoría en Estados Unidos, y envían alrededor de USD 61.000 millones anuales a sus familias.
Históricamente, este flujo económico ha sido gestionado por bancos tradicionales o casas de cambio con altos costos de envío y escasa inclusión financiera en comunidades rurales. Sin embargo, en la última década, las diásporas mexicanas (más conectadas y digitalizadas) impulsaron una transformación estructural a través de la siguiente pregunta: ¿cómo convertir el envío de dinero en una plataforma de desarrollo financiero y no solo en una transacción?, lo cual planteó una gran oportunidad a las fintech como catalizador de innovación, inclusión y competitividad nacional.
El problema: ineficiencia, exclusión y pérdida de confianza
Hasta hace pocos años, el envío de remesas desde Estados Unidos implicaba costos de entre 6 % y 8 % por transacción, tiempos de entrega prolongados y dependencia de intermediarios físicos, según el informe de Remittance Prices Worldwid del World Bank del 2024. Adicional a esto, la falta de infraestructura bancaria en comunidades receptoras dejaba fuera del sistema a millones de personas, ya que solo el 49 % de los adultos en zonas rurales tenía acceso a una cuenta bancaria (INEGI, 2024).
En conclusión, los migrantes enfrentaban barreras regulatorias y desconfianza hacia el sistema financiero formal, lo que mantenía un volumen considerable de transferencias informales, y las instituciones bancarias, por su parte, carecían de productos adaptados a las necesidades específicas de este segmento poblacional. El desafío era en tres dimensiones: tecnológico, cultural y de confianza: cómo conectar dos mundos (el migrante digital y el hogar desconectado) bajo un mismo ecosistema financiero.
La estrategia: digitalizar la diáspora
A partir de 2020, una nueva generación de startups mexicanas (como Bitso, Cuenca y Finvero) rediseñó el mercado de remesas a través de soluciones digitales centradas en el usuario migrante.
Su estrategia se apoyó en tres ejes:
Tecnología y costos
Implementaron sistemas basados en blockchain y stablecoins, reduciendo el costo promedio de envío a menos del 2 % y garantizando transacciones inmediatas, incluso entre monedas distintas.
Confianza y transparencia
Las plataformas ofrecieron seguimiento en tiempo real, atención personalizada y programas de educación financiera en comunidades receptoras. Esto incrementó la percepción de seguridad frente a la banca tradicional.
Inclusión y diversificación
Se crearon productos específicos: microcréditos para familias receptoras, seguros de vida vinculados a remesas, ahorro automatizado y opciones de inversión en pesos o dólares.
El modelo atrajo tanto a usuarios migrantes como a instituciones financieras tradicionales interesadas en asociarse. En 2024, Bitso alcanzó más de seis millones de usuarios en México y América Latina, consolidándose como un referente regional.
Resultados: un nuevo ecosistema de inclusión financiera
Los efectos fueron rápidos y profundos:
- En 2024, más del 30 % de las remesas a México se enviaron a través de canales digitales, frente al 8 % en 2019 (Banco de México, 2025).
- Las fintech mexicanas captaron USD 865 millones en inversión en 2024, lo que representa el 74 % del capital de riesgo desplegado en México ese año (2025 Fintech Radar Mexico Report).
- En México, el porcentaje de adultos con al menos un producto de ahorro pasó de 47,1 % en 2018 a 63 % en 2024, un aumento de 15,9 puntos porcentuales (National Financial Inclusion Survey 2024).
- Se crearon alianzas público-privadas para integrar a los retornados en programas de crédito productivo y formación financiera, como la Ley de Reinserción Económica y Social para el Migrante Retornado (Ley N.º 30001), y el Programa 3×1 para Migrantes que brinda asesoría técnica y facilita acceso a crédito para negocios vinculados a migrantes o retornados.
Más allá de las cifras, el impacto reputacional fue evidente: México comenzó a proyectarse como un laboratorio de inclusión financiera, donde la migración y la innovación convergen para generar bienestar y desarrollo local.
Lecciones y aprendizajes
- La movilidad humana impulsa la innovación cuando se traduce en datos. Analizar patrones de envío, destino y frecuencia permitió a las fintech anticipar necesidades y diseñar soluciones personalizadas.
- La confianza y adaptación es el nuevo valor financiero. En contextos de desconfianza institucional, las plataformas que comunican transparencia y propósito social logran legitimidad más rápido que las grandes entidades.
- El talento migrante es un activo estratégico. Muchos fundadores y empleados de estas startups son migrantes o retornados que comprenden la experiencia del usuario final.
- La inclusión es rentable. Lejos de ser un nicho asistencial, la base migrante se ha convertido en un mercado masivo que fortalece la estabilidad macroeconómica del país.
Educación internacional en España (atracción de talento latinoamericano).
España se ha consolidado en la última década como uno de los principales destinos mundiales para estudiantes internacionales, por su idioma, afinidad cultural con América Latina y oferta universitaria competitiva. En el curso académico 2022-2023 se registraron aproximadamente 241.777 estudiantes extranjeros matriculados en universidades españolas.
Según la encuesta Economic Impact of International Students in Spain, en 2023 los países latinoamericanos representaron una proporción significativa del estudiantado internacional en España. Ecuador (7,08 %), México (4,11%), Perú (3,89 %) y Chile (2,72 %) se ubicaron entre los principales países de origen. Este flujo de estudiantes generó un impacto económico estimado en aproximadamente 6.300 millones de euros, consolidando a España como uno de los destinos educativos más relevantes para la región.
Desafío
Para las universidades españolas, atraer talento latinoamericano implicaba superar varios retos:
- Convertirse en un destino competitivo frente a Reino Unido, Estados Unidos u otros países europeos que tradicionalmente acaparaban flujos internacionales.
- Adaptar servicios de orientación, acogida, visado y empleo para estudiantes latinoamericanos con distintos perfiles académicos, económicos y culturales.
- Transformar a los estudiantes internacionales no solo en fuentes de ingreso, sino en vectores de innovación, internacionalización de las instituciones y redes transnacionales de influencia.
Estrategia
Para afrontar esos desafíos, las instituciones educativas y autoridades españolas implementaron una serie de acciones estratégicas:
Programas de becas y convenios bilaterales
Implementaron sistemas basados en blockchain y stablecoins, reduciendo el costo promedio de envío a menos del 2 % y garantizando transacciones inmediatas, incluso entre monedas distintas.
Servicios de adaptación cultural y apoyo al estudiante
Se pusieron en marcha centros de atención al estudiante extranjero, mentorías, tutorías en español einglés, y programas de integración en los campus con fuerte componente latinoamericano.
Marketing internacional dirigido a América Latina
Las universidades reforzaron su visibilidad en América Latina mediante ferias, alianzas con entidades latinoamericanas, programas online que permiten estudiar desde el país de origen y rutas de transición a estudios presenciales en España.
Resultados
- El número de estudiantes extranjeros alcanzó un récord de cerca de 241.777 en 2022-23.
- El impacto económico estimado para ese curso fue de más de €6.300 millones, evidenciando que la internacionalización aporta valor más allá de la matrícula.
- Datos de origen de estudiantes muestran una participación significativa de América Latina, lo que confirma que España está captando el talento de dicha región.
Las universidades que adoptaron esta estrategia han fortalecido su reputación global, han ampliado sus redes de alumni latinoamericanos y han generado sinergias en investigación y colaboración internacional.
Aprendizajes
- La movilidad académica es inversión estratégica, no solo flujo educativo. La capacidad de atraer a estudiantes latinoamericanos implica generar ingresos, internacionalizar la institución, diversificar culturas en el campus y activar redes globales de influencia.
- La adaptación cultural es clave para retención. Más allá de la admisión, asegurar la experiencia del estudiante mediante servicios de acogida y redes de apoyo es decisivo para la satisfacción, la finalización de estudios y la fidelización de la institución.
- El talento latinoamericano conecta mercados. Los estudiantes procedentes de América Latina no solo estudian en España, sino proyectan marcas, emprendimientos y colaboraciones que vinculan España con sus países de origen, creando relaciones transnacionales de largo plazo.
- Diversificación geográfica y de perfil de estudiantes refuerza la resiliencia institucional. Atender estudiantes latinoamericanos disminuye la dependencia de determinados mercados internacionales y permite adaptarse ante turbulencias geopolíticas, económicas o migratorias de otros destinos tradicionales.
El movimiento del futuro. Radar IA
El movimiento también ocurre en el plano invisible de los datos y los algoritmos. La inteligencia artificial está empezando a leer, interpretar y proyectar los grandes flujos humanos, revelando patrones que antes pasaban desapercibidos. Comprender cómo las máquinas entienden la movilidad es parte de anticipar el futuro: una nueva forma de observarnos a nosotros mismos en movimiento, a través del espejo digital del siglo XXI.
Desde nuestro equipo de Deep Learning, desarrollamos el Radar IA, un estudio pionero que analiza cómo se construyen y perciben los grandes relatos sobre migración y movilidad humana. Incorporar esta capa de conocimiento (cuyos hallazgos aparecen a lo largo del informe) responde a la convicción de que la inteligencia artificial es ya una herramienta esencial para interpretar la conversación digital global y detectar hasta qué punto existen consensos o divergencias en torno a fenómenos tan sensibles como el que aborda este estudio.
Como se adelantaba en la introducción, el Radar IA combina rigor ético y visión estratégica, el potencial de la inteligencia artificial para ampliar la comprensión y detectar sesgos, reconociendo a la vez que los sistemas automatizados también pueden reproducirlos. Por ello, el ejercicio se sustentó en una cuidadosa selección de fuentes, idiomas y contextos culturales, con el fin de garantizar una lectura representativa y matizada de las percepciones regionales.
El Radar IA combina rigor ético y visión estratégica, el potencial de la inteligencia artificial para ampliar la comprensión y detectar sesgos.
Se utilizaron cuatro modelos de inteligencia artificial de última generación. Estos coincidieron en 69.2 % de sus evaluaciones sobre el impacto económico de la migración, revelando un consenso narrativo sorprendentemente alto en un tema tradicionalmente polarizado. Este estudio analiza 1,440 respuestas generadas por GPT-4o, Claude Sonnet 4, Gemini 2.0 Flash y Perplexity Sonar sobre 12 países de América y Europa, con el objetivo de mapear cómo estas tecnologías construyen y comunican narrativas sobre migración y economía.
Las respuestas se midieron en seis dimensiones clave:
- Marcos narrativos, identificando 12 categorías desde Económico-Laboral hasta Securitario.
- Sectores económicos mencionados como más afectados.
- Tono predominante, clasificado como equilibrado, crítico, muy positivo o mixto.
- Intensidad del impacto percibido, en escala de 0 a 10.
- Calidad de evidencia, según presencia de datos cuantitativos y estudios citados.
- Nivel de consenso entre los cuatro modelos.
Cada IA respondió 30 preguntas por país, generando 120 respuestas por nación.
Vías derivadas de empleo y redes de alumni latinoamericanas
- Predominio económico los modelos estructuran sus respuestas predominantemente desde marcos Económico-Laboral (99 % de respuestas) y Productividad-Competitividad (57 %), relegando dimensiones sociales, culturales y de seguridad a menos del 7 % de las narrativas.
- Innovación al frente el sector de Tecnología e Innovación concentra las menciones más positivas (41 %), con una intensidad promedio de 7,2 / 10 y presencia en los 12 países.
- Agricultura aparece en 23 % de las respuestas con la intensidad más alta registrada (7.8 sobre 10), con los modelos identificando dependencia crítica de mano de obra migrante en cultivos específicos.
- Mercado Laboral y Sector Público concentran las narrativas más críticas, mencionados en 17 % y 14 % de las respuestas respectivamente como áreas de tensión o desafío.
- Solo 51 % de las respuestas incluyen datos cuantitativos y apenas 29 % citan estudios específicos, revelando que las IAs construyen narrativas mayormente desde patrones generales más que desde evidencia empírica rigurosa.
- El marco Demográfico aparece en 38 % de las respuestas con tono equilibrado, mientras Innovación-Emprendimiento (36 %) y Cultural (6 %) muestran tonos muy positivos sistemáticamente.
Patrones geográficos
Portugal lidera con la narrativa más positiva (71.7 % de tasa positiva en 120 respuestas), seguido por España (67.5 % en 120 respuestas) y Estados Unidos (67.5 % en 120 respuestas). En contraste, República Dominicana presenta la narrativa más crítica (50.0 % positiva en 120 respuestas), seguido por Colombia (49.2 % en 120 respuestas) y Ecuador (47.5 % en 120 respuestas). Se observa un patrón donde países europeos y Estados Unidos reciben evaluaciones consistentemente más favorables que naciones latinoamericanas receptoras de migración sur-sur.
Sectores que los modelos identifican como ganadores
Tecnología e Innovación domina las narrativas positivas (41 % de menciones, intensidad 7.2 sobre 10), con los modelos destacando roles en desarrollo de software, análisis de datos y startups. Agricultura le sigue (23 %, intensidad 7.8 sobre 10), donde las IAs identifican dependencia estructural en cosechas estacionales y cultivos intensivos. Los modelos atribuyen estos impactos positivos a mecanismos como complementariedad de habilidades, rejuvenecimiento demográfico de la fuerza laboral y transferencia de conocimiento transnacional. El marco Innovación-Emprendimiento aparece en 36% de respuestas con tono muy positivo, enfatizando creación de empresas y dinamismo económico.
Sectores que los modelos identifican con desafíos
Mercado Laboral concentra las narrativas más críticas (17 % de menciones), donde los modelos señalan competencia por empleos de baja cualificación y presión salarial en segmentos específicos. Sector Público aparece en 14 % de respuestas, con las IAs identificando tensiones en provisión de servicios educativos y sanitarios en contextos de alta concentración migratoria. Los modelos mencionan como barreras principales la informalidad laboral, desajustes de cualificaciones y capacidad institucional limitada para gestión de flujos migratorios rápidos.
Nivel de consenso entre modelos
Los cuatro modelos alcanzan 69.2 % de consenso en sus evaluaciones, un nivel notable considerando la complejidad y sensibilidad del tema. Esta convergencia sugiere que las IAs comparten fuentes de entrenamiento similares y patrones narrativos comunes sobre migración y economía. Las divergencias más significativas aparecen en estimaciones cuantitativas específicas y en la ponderación relativa de impactos positivos versus desafíos, más que en los marcos conceptuales fundamentales.
Calidad de la evidencia utilizada por las IAs
Solo la mitad de las respuestas incorpora datos cuantitativos y menos de un tercio cita fuentes verificables. Las IA tienden a ofrecer marcos conceptuales sólidos pero con escaso respaldo empírico, lo que plantea desafíos para la trazabilidad y la verificación en contextos de toma de decisiones.
Implicaciones clave
Las IAs reproducen un sesgo sistemático hacia narrativas económico-laborales (99 %), marginando dimensiones sociales, culturales y de seguridad que son centrales en debates públicos reales sobre migración.
Existe un patrón geográfico consistente donde países europeos y Estados Unidos reciben evaluaciones más favorables que naciones latinoamericanas, sugiriendo posibles sesgos en datos de entrenamiento o literatura disponible.
La baja tasa de citación de estudios (29 %) indica que estas tecnologías operan más como sintetizadores de consensos generales que como herramientas de investigación rigurosa, lo que requiere verificación humana experta.
Los tomadores de decisiones deben considerar que las narrativas de IA sobre migración priorizan impactos económicos agregados sobre distribución de costos-beneficios, omitiendo sistemáticamente análisis de equidad y cohesión social.