Una Sola Salud y millones de voluntades para lograrlo

Una Sola Salud y millones de voluntades para lograrlo

Las conexiones entre humanos, animales y medio ambiente son complejas, enmarcadas por profundas interdependencias en las cuáles, lo que le sucede a uno afecta directamente a los otros. Para quienes lo duden, las pinturas rupestres de las cuevas de Lascaux en Francia o las halladas en la cueva de Altamira en España, entre muchas otras, dan fe de esta relación inmemorable. 

Hoy, probablemente una de las muestras más tangibles de estas  conexiones es el hecho de que aproximadamente dos terceras partes de las enfermedades infecciosas humanas emergentes se transmiten de los animales a las personas, es decir, son zoonóticas. 

La pandemia por COVID-19 es uno de los ejemplos más recientes de la urgencia de esfuerzos colaborativos entre empresas, gobiernos, academia y comunidades a lo largo y ancho del mundo para prevenir y atender este tipo de enfermedades porque los virus, bacterias y hongos como Cordyceps – quienes sean fanáticos de la serie de HBO, The Last of us, entenderán la referencia- no conocen de fronteras entre naciones. 

Es aquí donde la noción de Una Sola Salud cobra importancia. Si bien no es un concepto nuevo, conforme nos hemos vuelto más conscientes de la relevancia económica, ambiental y hasta emocional de los animales en el desarrollo o declive de la humanidad, aprendemos también que de nada sirve predecir las grandes amenazas que pueden poner en jaque a nuestro planeta si poco o nada hacemos para evitar que sucedan.

Me explico. México se había convertido en un referente internacional por tener cero casos de rabia en humanos, al menos fue así durante los últimos 15 años. Sin embargo, entre finales de 2022 e inicios de 2023, en diversos estados del país comenzaron a levantarse alertas por casos confirmados de rabia transmitida de perros a humanos y algunos otros, de murciélagos a humanos. 

¿Por qué pasó esto? Porque poner en marcha y materializar un concepto como Una Sola Salud, es sumamente complejo si se deja en manos de una parte de los actores mencionados anteriormente; por sí sola ninguna empresa u organización puede incorporar los recursos y capacidades necesarias para lograr este nivel de prevención y atención, sobre todo en regiones como América Latina, vitral de las grandes inequidades en el acceso a servicios básicos y donde más de 180 millones de personas viven en situación de pobreza. 

Por el contrario, se requiere de la suma de esfuerzos articulados y constantes que partan del involucramiento de individuos y comunidades en la identificación de necesidades, retos y la puesta en marcha de posibles soluciones. 

Además de las campañas anuales de vacunación tanto de perros y gatos como de profilaxis en personas que viven en áreas de riesgo, deben implementarse modelos de desarrollo social y económico sostenibles, en línea con los objetivos de desarrollo de esta misma índole planteados por Naciones Unidas.  

Así, las campañas de vacunación, tanto de humanos como de animales, deberían de estar acompañadas de campañas de comunicación de igual o mayor magnitud enfocadas en generar conciencia entre las comunidades del impacto de estas enfermedades transmisibles. Esas mismas campañas deberían darse sobre una base mínima de cobertura de necesidades mínimas de las comunidades. 

Para lograr que el concepto de Una Sola Salud sea viable se necesita que millones de voluntades converjan en la búsqueda del mismo objetivo.

Alejandro González Manager Healthcare México en LLYC

Alejandro González Manager Healthcare México en LLYC