Chile concluyó hoy su proceso de cambio constitucional rechazando la propuesta de carta magna, con lo que seguirá vigente la actual Constitución. Este resultado, promovido por fuerzas de centro, derecha y algunos representantes del socialismo, supone el reinicio de un nuevo proceso constituyente, aunque dependerá de los acuerdos que se gesten entre el Ejecutivo y el Congreso.
Tal como lo habían previsto las encuestas, Chile se pronunció en las urnas y desechó la propuesta constitucional realizada por el grupo de 155 convencionales electos para ese fin. La opción Rechazo se impuso con un 61,9% (7.768.020) de los votos por sobre el 38,1% (4.780.706) obtenido por el Apruebo en el plebiscito constitucional de este domingo. Si bien, el Servicio Electoral aún está realizando el conteo de los votos, con el actual 98,4% de las mesas de votación escrutadas, la tendencia es definitiva y el Rechazo ganó en todas las regiones del país por una amplia diferencia. Puede decirse que el gran perdedor de esta jornada es el gobierno y las alianzas que lo respaldan, el Frente Amplio (alianza de jóvenes partidos de izquierda), el Partido Comunista y parte del socialismo, quienes se mostraron favorables al cambio constitucional durante el proceso.