Del Nearshoring al Safeshoring. ¿Cómo las empresas que llegan a México pueden proteger su reputación y negocio?

El nearshoring, o la relocalización de las cadenas productivas (especialmente manufactureras), es quizá el fenómeno geopolítico que mayor impacto podría generar en México durante la próxima década. Son muchas las empresas que, conscientes de la disputa comercial entre Estados Unidos y China, la guerra entre Rusia y Ucrania y el potencial destructivo de una nueva pandemia, están trasladando sus producciones de Asia hasta Norteamérica.

Este fenómeno está beneficiando a los tres países de la región. Pero México se ve como el potencial mayor beneficiado por ser el principal socio comercial de Estados Unidos, tener históricamente una mano de obra competitiva y ahora también muy especializada técnicamente, y por los múltiples tratados comerciales con los que cuenta, especialmente el renovado Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).

Si bien se trata de un fenómeno geopolítico, es también una estrategia comercial de las empresas trasnacionales, incluso las asiáticas, que buscan reducir costos y mitigar riesgos logísticos. De hecho, de acuerdo a un estudio reciente de la firma PwC, la reubicación de subsidiarias de China en México les permitiría reducir sus costos operativos hasta en un 23% .

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