Argentina vuelve a cambiar de rumbo

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31 Oct 2019

Tras 4 años de Gobierno de Mauricio Macri, los argentinos eligieron a Alberto Fernández como el próximo presidente de la Nación. Lo secundará Cristina Kirchner, quien vuelve a la primera plana política después de dejar la presidencia en 2015.

El Frente de Todos se impuso por el 48,10 % de los votos a Juntos por el Cambio, que obtuvo el 40,37 %. Sin embargo, era de esperar que la diferencia de votos fuera mayor. La Provincia de Buenos Aires fue el factor desequilibrante de la elección por representar el 38 % del padrón electoral.

Principales actores políticos

Alberto Fernández- Presidente

Se desempeñó como jefe de Gabinete de Ministros entre 2003 y 2008 durante las presidencias de Néstor Kirchner y Cristina Fernández de Kirchner. Abandonó sus funciones al momento en que Cristina Fernández radicalizó su posición con respecto a los medios de comunicación y al sector agro-ganadero.

Cristina Fernández de Kirchner- Vicepresidenta

Dos veces presidenta de la República Argentina, entre 2007 y 2015. Durante sus gobiernos profundizó las políticas implementadas a lo largo de los cuatro años en que presidió su marido, Néstor Kirchner. Cuenta con amplia experiencia en el Poder Legislativo, se ha desempeñado como diputada y senadora nacional en múltiples oportunidades. Hoy por hoy es senadora nacional por la provincia de Buenos Aires.

Prioridades del próximo gobierno

  • Inflación. Alberto Fernández señaló que gran parte de la inflación se debe al manejo que hacen de los precios unas pocas empresas, por lo que propone una mayor regulación por parte del Estado, a fin de evitar la marcación unilateral de precios. 
  • Desempleo-pobreza. Según el dato oficial de septiembre de 2019, la pobreza aumentó al 35,4 % y alcanza a 15,9 millones de argentinos. Alberto Fernández propone la conformación de un pacto social entre empresarios, trabajadores y el Estado. A raíz de ello, en calidad de referente político y candidato, ya ha mantenido reuniones con dirigentes gremiales y sindicalistas, propiciando el diálogo entre las partes.
  • Deuda. Alberto Fernández ha negado la posibilidad de defaultear la deuda, por lo que se comprometió a cumplir con las obligaciones tomadas por el gobierno macrista. Sin embargo, no se descarta una recalendarización de los vencimientos de pago de los compromisos tomados con el FMI (y de los intereses).
  • Consumo. Ante la disminución del poder adquisitivo, la devaluación de la moneda, la aceleración de la inflación, la pérdida de empleos y la caída del consumo, Alberto Fernández propone profundizar el pacto social entre sindicalistas y empleadores. Entre las herramientas que ha enunciado, se destaca el plan integral “Argentina sin hambre” y la Ley de Góndolas, que regulará el porcentaje de espacio que podrá ser empleado por las marcas, propiciando el ingreso a la cadena de comercialización de las pequeñas y medianas empresas regionales.

«A lo largo de la campaña, Alberto Fernández ha repetido que su gobierno será de un presidente y 24 gobernadores»

Administración Pública

Se espera que Alberto Fernández aúne ministerios, elimine secretarías insignia del macrismo (por ejemplo, Modernización) y cree algunas carteras. Por otra parte, a lo largo de la campaña, Alberto Fernández ha repetido que su gobierno será de un presidente y 24 gobernadores. La idea de federalización es transversal a su propuesta gubernamental.

Política Exterior

Mauricio Macri posicionó su mirada en Estados Unidos y la Unión Europea, principalmente. El contexto internacional fue desfavorable con la llegada de Donald Trump al poder y el Reino Unido votando su salida de la Unión Europea.

Considerando este nuevo contexto, Alberto Fernández tomaría las siguientes directrices:

  • Nuevos/viejos socios de Argentina. Apostar por la integración regional, haciendo énfasis en la necesidad de reiniciar la UNASUR (Unión de Naciones Suramericanas).
  • Acuerdo Unión Europea – Mercosur. Alberto Fernández ha puesto en duda la continuidad del Acuerdo, argumentando que hay países europeos que lo han rechazado. Asimismo, se ha enfocado especialmente en que Argentina preserve sus intereses nacionales.
  • Cuestión Malvinas. Desde el Frente de Todos consideran que la gestión de Mauricio Macri no ha avanzado en la disputa de la soberanía sobre las Islas del Atlántico Sur. Se ha criticado fuertemente el Acuerdo Foradori-Duncan, que fuera firmado en 2016. La propuesta desde el próximo oficialismo es adoptar nuevamente una posición confrontativa, semejante a la tomada durante los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner.

«El nuevo presidente deberá contar con apoyos que le otorguen gobernabilidad durante los primeros cien días de gestión»

¿Qué factores influyen en la gobernabilidad de Alberto Fernández?

A partir de la crisis económica, los vencimientos de deuda, el aumento de la pobreza y el desempleo, la ocupación del espacio público en manos de movimientos sociales, el nuevo presidente deberá contar con apoyos que le otorguen gobernabilidad durante los primeros cien días de gestión. Entre los principales actores, se destacan:

  • El grupo de los gobernadores. Del total de 24 gobernadores, tres pertenecen a fuerzas provinciales (Río Negro, Neuquén y Misiones), cuatro a partidos que conforman la alianza de Juntos por el Cambio / Cambiemos (Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Corrientes, Mendoza y Jujuy) y los demás responden al Partido Justicialista o son aliados peronistas.
  • El Congreso de la Nación. El próximo oficialismo contará con mayoría propia en el Senado y estará cerca de reunir el quorum en Diputados, aunque necesitará negociar con otros espacios.
  • Sindicatos. En la Argentina hay un amplio tejido de movimientos sindicales, que entre sí presentan diferencias históricas y rivalidades. Alberto Fernández impulsó la unidad entre la Confederación General del Trabajo (CGT) y la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA), distanciadas en los años 90. Asimismo, se encuentra latente la posibilidad de realizar una Reforma Laboral, por lo que será elemental el consenso con el sector trabajador.
  • Movimientos Sociales. Principalmente beneficiarios de planes sociales y trabajadores de la economía popular que reclaman contar con las condiciones laborales y sociales que dicta la ley.

Conclusiones

  • Primero y principal, aunque Alberto Fernández ha sido designado como cabeza de fórmula por la mismísima expresidenta, cabe aclarar que Alberto Fernández no es Cristina Fernández de Kirchner. Ha buscado diferenciarse criticando algunas de las políticas implementadas por Cristina Fernández durante su última presidencia.
  • Fernández, sin cheque en blanco. No pudo perforar el techo del 48 %, por lo que tendrá que negociar su agenda parlamentaria en ambas Cámaras.
  • Se espera que Alberto Fernández gestione un gobierno menos intervencionista que el de Cristina Fernández de Kirchner. Tendrá como finalidad reactivar la economía interna a través del consumo, pero propiciará herramientas estatales de regulación de los mercados.

Autores

Mariano Vila
Juan Ignacio Di Meglio

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