Tras 25 años de experiencia en el sector minero, LLYC adapta su oferta y pone en marcha un nuevo área de especialidad para responder a los desafíos de estas industrias. Mineraliza tu reputación busca afrontar de manera innovadora y realista los retos a los que se enfrentan las empresas en las distintas etapas del proceso, desde la exploración, pasando por la construcción, operación y cierre.
El equipo de Proyectos Especiales en Estados Unidos y un grupo de especialistas en cada una de las operaciones globales, impulsarán la construcción de relaciones de confianza, la gestión de la resiliencia reputacional y el despliegue de soluciones, desde la comunicación estratégica, el branding, la diplomacia corporativa y la tecnología como derrotero, al servicio de los proyectos mineros en América Latina y el Caribe, adaptando las capacidades de la Firma a la lógica secuencial y procesos especializados de esta industria clave.
Juan David Alba, director del equipo de Proyectos Especiales, explica: “En un mundo hiperconectado y saturado de mensajes, en el que existe una fuerte oposición hacia las industrias extractivas, muchas veces basado en mitos e información falsa, la buena reputación es el activo más valioso que puede producir un proyecto minero. Por eso, diseñar una metodología que nos permita poner nuestra estrategia y creatividad para la comunicación, el marketing y los asuntos públicos, al servicio de las particularidades y especialización de esta industria; es clave para marcar la diferencia y consolidar modelos mineros sostenibles y exitosos”.
Con esta nueva propuesta de valor, que recoge la experiencia adquirida durante más de dos décadas trabajando con clientes líderes del sector minero, y adaptada a las realidades del contexto actual, LLYC se consolida como un aliado estratégico de los actores de la industria en el continente. Contribuyendo desde un ecosistema global y multidisciplinar, a que las empresas mineras puedan anticiparse a las expectativas de los distintos stakeholders, lideren la conversación y construyan comunidades, basadas en la gestión de confianza, para materializar su propósito.
